En los últimos años, han surgido numerosos cambios (tecnológicos, nuevas competencias, diferentes plataformas, etc.) que hacen necesario el estudio y actualización de multitud de aspectos. Por ello, la formación se ha convertido en un elemento indispensable a la hora de mejorar la competitividad y productividad de las empresas.
Las prácticas formativas son una gran oportunidad tanto para las empresas como para las personas que las realizan, ya que ambas partes se retroalimentan y benefician en múltiples aspectos:
- Mejorarás tu currículum.
Las habilidades aprendidas en una empresa te aportarán experiencias muy significativas que podrás añadir a tu CV.
- Adaptación.
No es lo mismo empezar a trabajar en una empresa con un puesto específico que realizando una labor de prácticas. El no tener tanta presión hará que cojas confianza y puedas ir adaptándote poco a poco.
- Analizar el sector.
Realizar unas prácticas te dará la oportunidad de conocer y comprobar desde cerca si es realmente lo que te gusta y si es lo que quieres para tu futuro.
- Aprendizaje.
Dicen que los primeros meses laborales es cuando más se aprende, ya que irás recibiendo multitud de estímulos nuevos. Estos estímulos te ayudarán a mantenerte atento y a prestar más atención a cada situación que se te presente.
Por esto, realizar unas prácticas formativas se convierte en una experiencia tan única e importante para tu carrera profesional y desarrollo personal.
- Motivación.
Las empresas, al coger personas en prácticas obtendrán grandes beneficios, ya que suelen estar muy motivadas, tener grandes intereses por colaborar, en demostrar sus aptitudes, desarrollar nuevas habilidades, etc.
- Permanencia.
Si al final de tu período de prácticas demuestras tus aptitudes y lo que podrías aportar a la empresa, es muy posible que te quieran mantener en su equipo y contratar.
Así que no lo dudes, si estas pensando en realizar prácticas formativas, ¡es tú momento!